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15.05.19

Panamá: vuelve la socialdemocracia

El plan de gobierno reiterado durante la campaña electoral por Laurentino Cortizo, previsiblemente incluye mejoras en la educación, economía, acotar la pobreza, reformar el Estado y mejorar la transparencia gubernamental. No obstante, los solamente 40 mil votos de ventaja sobre el segundo candidato, son la evidencia de que deberá tejer acuerdos para desarrollar un mínimo plan de gobierno.
Por Hugo Machín Fajardo

No debería pasar desapercibido, en el convulso panorama caribeño, el resultado electoral de Panamá del pasado 5 de mayo, en que Laurentino Nito Cortizo (66) obtuvo 634.969 votos (33,19%) contra el liberal Cambio Democrático (CD), que llegó a los 593.569 votos (31,02%. Cortizo se propone “rescatar el nombre de Panamá” y apoyar la recuperación democrática en Nicaragua.

Cortizo pertenece a un partido fundado por un militar golpista, como fue Omar Torrijos (1929 - 1981), el Partido Revolucionario Democrático (PRD), hoy socialdemócrata. Torrijos, que inició su mandato reprimiendo a la izquierda en 1968, luego cambió a una postura no alineada, apoyó la revolución nicaragüense de 1979 contra Somoza, para morir en un extraño accidente de aviación luego de obtener la recuperación del canal panameño tras negociarlo en 1977 con la administración Carter.

Carlos Guevara Mann, profesor de ciencia política de la Florida State University en Panamá, ha dicho al periódico colombiano Portafolio que “el principal reto [de Cortizo] es crear un marco constitucional democrático y legítimo que facilite la atención de los problemas nacionales y desincentive la corrupción, a través del adecuado funcionamiento de los órganos del Estado y una mayor participación ciudadana. Panamá todavía opera bajo la constitución impuesta por la dictadura militar, que privilegia la partidocracia, el clientelismo y la corrupción, y fomenta el desprecio de las autoridades por el pueblo y sus necesidades”.

El plan de gobierno reiterado durante la campaña electoral, previsiblemente incluye mejoras en la educación, economía, acotar la pobreza, reformar el Estado y mejorar la transparencia gubernamental. No obstante, los solamente 40 mil votos de ventaja sobre el segundo candidato Rómulo Roux, de derecha y apoyado por el encarcelado ex presidente Ricardo Martinelli, acusado de espionaje telefónico y corrupción, son la evidencia de que deberá tejer acuerdos para desarrollar un mínimo plan de gobierno.

Contrastes. Pese a poseer el más alto índice de crecimiento de América Latina, la pobreza en Panamá se percibe en las provincias y alcanza ribetes dramáticos en las comarcas indígenas (80%). Los últimos datos del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI) son de 2016, cuando se calculó que un 22,1 por ciento (884.000) de la población es pobre y un 6,9 por ciento (276.000) vive en pobreza extrema, superior a Costa Rica, El Salvador y Nicaragua.

En el aspecto seguridad, Panamá tiene la ventaja contar con una tasa de homicidios de 11,4 por cada 100.000 habitantes, cerca de la mitad que el promedio latinoamericano.

Panamá Papers. La megacorrupción anidada en Panamá, puesta en evidencia en 2016 por los “Papeles de Panamá”, es una pesada losa sobre el prestigio nacional. Fue uno de los focos de la campaña electoral y Cortizo, que asumirá el primero de julio, se comprometió a limpiar el nombre del país. La Fiscalía panameña documenta desde 2016 el inicio de un centenar de causas por corrupción, más de 700 personas imputadas y más de USD 416 millones recuperados. La publicación de los Papeles de Panamá permitió iniciar investigaciones en 79 países, donde se evalúan casos de evasión fiscal o lavado de dinero. Al menos 500 bancos y sus filiales registraron empresas fantasmas, según el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ por sus siglas en inglés).

Internacional. Quizás donde más se hagan sentir los efectos de la administración Cortizo sea en lo regional. No es poco que Panamá mantenga el libre juego democrático electoral, ni que el presidente electo haya declarado su voluntad de que Nicaragua, país con el que lo unen lazos de afecto personal, vuelva a vivir en democracia. Cortizo y el Secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, conversaron el pasado viernes 10 de mayo y acordaron seguir trabajando juntos en temas de seguridad, promoción de la estabilidad regional y abogar por la democracia en Venezuela y Nicaragua, según informa La Prensa de Ciudad de Panamá.

El otro gran tema para la nueva administración panameña es definir una correcta relación con China que, supuestamente, Cortizo también debería haber conversado con Pompeo.

En su anuncio posterior al triunfo, el presidente electo de Panamá reclamó mayor atención de la Casa Blanca hacia Centroamérica, o resignarse al incesante crecimiento diplomático y económico de China en la región.