Entrevistas

01.02.06

Alfredo Forti:

«Zelaya llega con una agenda de cambio»

«En ese contexto, de problemáticas sociales, de una severa crisis que afecta a la mayoría de la población respecto a su acceso a la educación, a la justicia, se presenta este nuevo gobierno del presidente Zelaya».

Alfredo Forti es el Embajador de la República Argentina en Honduras.

 

  • Para los observadores externos y la comunidad diplomática en Honduras, las primeras medidas que ha adoptado el presidente demuestra, realmente, claros vientos de cambio positivo.
  • Se han logrado altos niveles de consenso respecto de la ley de transparencia, y que existe el compromiso de las bancadas principales de aprobarlo.
  • Hay expectativas, en general, de que este tratado de libre comercio redunde en mayores inversiones. Se calcula que para Honduras serían alrededor de 250 millones el primer año.
  • Los términos en la relación bilateral entre Argentina y Honduras pasan por uno de sus mejores momentos.

 

Gabriel Salvia: ¿Cuál es la situación política en Honduras y qué desafíos enfrenta el nuevo gobierno?

Alfredo Forti: En primer lugar, estas elecciones por las cuales asumió el nuevo presidente Zelaya, representan el sexto gobierno civil. La etapa de gobiernos civiles se inició en 1982 después de largos años de gobiernos militares. Este es un país que no se diferencia mucho del resto de los países Latinoamericanos en el sentido que la situación económica y social conlleva similares niveles de problemas. En el caso de Honduras estamos hablando de un país muy rico a nivel natural, pero con altos niveles de pobreza, ya que tiene más del 70% de la población bajo el nivel de pobreza. País que expulsa, por los altísimos niveles de inequidad a mucha gente. Para darles una idea, de una población total de poco más de seis millones de habitantes alrededor de un millón de hondureños viven, especialmente, en los Estados Unidos y son la población que reporta la principal fuente de ingresos a este país a través de las remesas que envían a sus familiares acá. El año pasado se llegó a un record de 1.400 millones de dólares, siendo el primer rubro de ingresos. En ese contexto, de problemáticas sociales, de una severa crisis que afecta a la mayoría de la población respecto a su acceso a la educación, a la justicia, se presenta este nuevo gobierno del presidente Zelaya, que llega desde la oposición al anterior gobierno, que era del partido Nacional, Zelaya es del partido Liberal (Honduras es básicamente un país bipartidista, existen otros tres partidos mucho más pequeños). Y Zelaya llega con una agenda de cambio, con una propuesta de revertir y modificar aspectos estructurales de la situación de la que estamos hablando. Y le puedo decir Gabriel, que para los observadores externos y la comunidad diplomática en Honduras, las primeras medidas que ha adoptado el presidente demuestra, realmente, claros vientos de cambio positivo, diría yo, en esta situación.

G. S.: ¿Cuáles son esas medidas Embajador?

A. F.: Bueno, algunas de las principales. En este país existía hasta ahora, lo que aquí se llama la matrícula escolar, para las escuelas públicas. El presidente Zelaya, en una de sus medidas, suspendió, eliminó la matrícula escolar. Y no sólo eso, porque mucha gente con el inicio del ciclo escolar ya había abonado la matrícula, por lo que se está en un proceso de devolución. Eso más que nada, refleja su política, que ha planteado en la etapa electoral, de garantizar el acceso a la enseñanza para toda la población. Después en el mismo día de toma de posesión, y luego de su juramentación, se aprobó por parte del Congreso y se promulgó luego lo que se llama la ley de partición ciudadana. Es una ley muy interesante que promueve la organización de las diferentes instancias de la sociedad, en su relación con las instancias estatales, para propiciar la transparencia y el control de gestión por parte de las autoridades del estado, en un mecanismo altamente participativo. Y hubo una tercera medida que causó fuerte impacto. Honduras es un país de vocación básicamente forestal, más que agrícola, y acá se viene dando una tremenda y severa tala ilegal que está afectando totalmente las posibilidades económicas de este país, con una desertificación avanzada. Por lo que el presidente en una de sus primeras medidas ordenó la involucración de las fuerzas armadas  en el control y cuidado de los bosques donde se llevaba y se lleva a cabo la práctica de la tala ilegal. Esas son medidas que marcan un cambio con los gobiernos anteriores. Son medidas que indudablemente no son fáciles, tienen altos costos, algunas de carácter económico, otras político, al afectar a ciertos sectores de poder. Pero por otro lado demuestra la voluntad clara del nuevo gobierno en entrarle a los problemas que impiden el progreso en Honduras.

G. S.: Leía en una información que distribuyó PROBIDAD, una organización que se dedica a temas de transparencia, que hubo una iniciativa de la ley de acceso a la información pública, y que no contó con el apoyo legislativo, lo cual llama la atención porque el partido del presidente tiene amplia mayoría. ¿Esto es porque afecta muchos intereses?

A. F.: Bueno, el congreso tiene 128 diputados, de los cuales 62 son del partido Liberal, en este caso oficialista, y existe una oposición que si se junta logra más votos que el partido de gobierno. Entiendo que se han logrado altos niveles de consenso respecto de la ley de transparencia, y que existe el compromiso de las bancadas principales de aprobarlo. Hay ciertas diferencias respecto de algunos contenidos de la ley, sobre todo en el área que usted menciona, esto es de acceso a la información. No sé, ni estoy en condiciones de decirle si eso corresponde a grupos o intereses que se sentirían afectados, o diferencias de cómo implementar, como articular la legislación. Pero es cierto que no fue aprobada el primer día pero sí que está muy vigente en la agenda legislativa.

Ricarlo Lopez Göttig: ¿Qué expectativas despierta el acuerdo de libre comercio con Centro América?

A. F.: El acuerdo ha sido aprobado y firmado por todos los congresos de los países de Centro América y República Dominicana, aunque no ha podido entrar en vigencia como estaba previsto el primero de enero, porque faltan una serie de aprobaciones de leyes en el orden interno de cada uno de los países respecto de distintos compromisos que conlleva el CAFTA, como le dicen a este acuerdo de libre comercio. Sobre todo de propiedad intelectual, apertura en ciertas áreas de la economía, etc. Por un lado obviamente genera altas expectativas al ser Estados Unidos básicamente el mercado más grande y que absorbería todas las posibilidades de incremento de exportaciones y de producción que se generaría en la región. Pero por otro lado, existen también muchos sectores que sienten que la entrada en vigencia va a afectar a algunos sectores de la economía que en Centro América, por ejemplo la agricultura, para algunos países representa más del 50% de la actividad económica. De todos modos hay expectativas, en general, de que este tratado de libre comercio redunde en mayores inversiones. Se calcula que para Honduras serían alrededor de 250 millones el primer año. Y al mismo tiempo obliga y pone el desafío a los sectores empresariales a eventualmente tener que hacer alianzas estratégicas con otras contrapartes externas para poder competir y solucionar el problema de la competitividad, de la tecnología y de muchas cosas que no están preparadas frente al estado norteamericano y a los otros competidores que están entrando.

G. S.: Embajador, cuéntenos un poco cuáles son las prioridades en la relación entre Argentina y Honduras.

A. F.: Los términos en la relación bilateral entre Argentina y Honduras pasan por uno de sus mejores momentos. Existe una voluntad muy clara y muy firme por parte del presidente Kirchner de profundizar los lazos. Y hemos venido trabajando específicamente en tres ejes de acción: el acercamiento en el campo político, el eje comercial, y el eje de la cooperación horizontal entre Argentina y Honduras. Respecto al campo comercial, podemos decir que en los últimos tres años se ha visto un aumento muy marcado en las exportaciones argentinas a Honduras que se han quintuplicado. En el campo de la cooperación horizontal, Honduras ha pasado a ser el tercer o cuarto país a nivel global receptor de proyectos de cooperación horizontal de la República Argentina. Y en el campo político, hemos sido testigos en los últimos dos años de una serie de acuerdos interinstitucionales en el campo de diferentes ministerios, programas de cooperación Argentina en materia de fortalecimiento institucional, en el campo de administración de justicia, derechos humanos. Y con el nuevo gobierno vemos una mayor afinidad. Una clara expresión de deseos por parte del presidente Zelaya al canciller Taiana que estuvo representando al presidente Kirchner en la toma de posesión, fue precisamente de ese deseo de acercamiento, esa identificación con los postulados en materia de política que tiene el gobierno del presidente Kirchner. Y algo muy interesante, se ha avanzado mucho, y con un gran apoyo por parte del gobierno hondureño, para lo que sería la firma, la concreción de un mecanismo de diálogo político y concertación entre Argentina y los países del Sistema de la Integración Centroamericana, que son los cinco países centroamericanos, que incluyen a Honduras, más Panamá y Dominicana. Eso es una muestra también, no sólo del interés y el acercamiento de la Argentina a la región en general, sino una respuesta muy positiva que yo podría resumir en que tanto Honduras como el resto de los países de la región, comienzan a mirar al sur.